El 24 de agosto es el día del lomito, tal como nos enseña el calendario litúrgico del sánguche.
Como su nombre lo indica, es un sánguche (sánduche) de lomo de cerdo.
¿Qué hace un buen lomito?
¿Cocido o a la plancha?
Al parecer hay dos formas principales de preparar el lomito: cocido en su caldo, como el de la fuente alemana, o s la plancha, como en otros lugares, notablemente el Baquedano. Ambos tienen su encanto. Cocido y mantenido caliente, tiene las ventajas de la terneza y de la inmediatez de su preparación, mientras que a la plancha trae consigo las delicias de Maillard.
¿Qué pan?
El lomito en pan de molde tiende a desarmarse, por lo que hay que ser rápido en su consumo, o recurrir a esa traición a la memoria de John Montagu que es el comérselo con cuchillo y tenedor. Preferimos el pan de frica, o incluso el pan amasado por su solidez.
Sea el caso que sea, y aunque en la Fuente Alemana que es una especie de Vaticano del sánguche no lo hagan así, consideramos vital tostar el pan para darle alguna resistencia a los jugos y también contraste textural. En el caso del pan de molde es aún más importante hacerlo.
¿Qué versión del lomito?
Su nombre es legión. Existen distintas variedades para el lomito (y una serie de otras proteínas, como churrascos, ave, gordas, etc.). Una lista no exhaustiva es:
- Completo. Tomate, mayonesa, chucrut o americana
- Italiano. Tomate, mayonesa, palta (aguacate) molida. Es nuestro preferido con el añadido de ají verde.
- Diplomático. Queso fundido
- Tropical. Piña caramelizada
- A lo pobre. Cebolla caramelizada y huevo frito. Papas fritas al lado.
- Dinámico. Completo + palta
- Chacarero. Tomate, porotos verdes (vainitas) y ají verde.
¿Cuál es tu favorito?