Tanto las salchichas como el tocino han recibido mala prensa últimamente, pero está claro que las cosas en moderación no hacen mal. Presentamos esta receta de Danger dogs –hot dogs con la salchicha envuelta en tocino– para cuando quieras darle un cambio a tus completos.
El nombre danger dogs imaginamos que proviene del riesgo cardiovascular que implican, aunque quizá provenga del patrón de franjas diagonales que produce el tocino enrollado en la salchicha, como de esas cintas plásticas amarillas y negras que se usan para acordonar zonas.
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Los Danger dogs no requieren mayor ciencia. Requieren, eso sí, más ciencia que un completo. La idea es enrollar una lámina de tocino en forma espiral en la salchicha antes de cocinarla. Aquí las hicimos en la sartén.
Quizá sea bueno asegurar las láminas de tocino a los extremos de las salchichas con un palillo , que no debemos olvidar quitar después.
Quizá el truco para unos danger dogs buenos está en darlos vuelta para que el tocino quede dorado y crujiente por todos lados. Parte d ela gracia es el contraste de texturas entre la salchicha y el tocino. Perdón por la insistencia, pero no olvidemos quitar los palitos que aseguran el tocino.
El armado del hot-dog no tiene mayor ciencia, o quizá sí. Quizá quieras revisar estas reglas de etiqueta sobre el armado.
Se recomienda utilizar salsas frutales para este danger dog. Nosotros, que los preparamos en forma un poco improvisada, utilizamos chutney, en este caso de physalis, y anduvo muy bien.
La recomendación es preparar un relish con piña, mango y pepinillos, pero eso quedará para una próxima iteración.
Por ahora te contamos que estos danger dogs van a incorporarse en nuestro repertorio, no para cada vez que se preparen completos, pero sí para alguna completada especial.
Conversando al respecto, nuestro amigo Carlos nos mencionó por proximidad el pancho con poncho argentino, un hot-dog con jamón u otro fiambre y queso.
Al parecer será nuestro próximo experimento.
Reportaremos.
