El Garam Masala es una mezcla de especias muy popular en India. Garam Masala quiere decir “mezcla caliente” más en un sentido de “activador” de la medicina tradicional, que en el sentido de “picante” que le solemos dar.
El Garam Masala es picante, sí, pero no por ají sino por la intensidad de las especias, y sobre todo por la pimienta negra.
Como con todas estas recetas tradicionales no hay una versión canónica, ya que cada familia e incluso cada casa tiene su propia versión. Sin embargo lo que describimos más abajo es un buen punto de partida.
Variantes del Garam Masala
Lo que nos viene a la cabeza cuando hablamos de Garam Masala es el polvo, pero existe también el “Garam Masala entero” que consiste en algunas de las especias que se utilizan para el povo, pero enteras. Usualmente se fríen en el ghee o el aceite en el que cocinaremos para darle sabor.
Por ejemplo, si queremos saborizar un arroz, para 2 tazas de arroz necesitaremos las siguientes especias y cantidades:
- 4 clavos de olor
- 1 palo de canela de unos 5cm de largo
- 1 cucharadita de semillas de comino
- 1 cucharadita de semillas de hinojo
- 4 granos de pimienta negra
- 3 vainas de cardamomo, aplastadas
- 4 hojas de laurel pequeñas
- 1 anís estrella (opcional)
Habiendo mencionado el garam masala entero, volvamos a lo que probablemente te interesa, que es la versión en polvo, que como ya comentábamos tiene una serie de variantes región por región, familia por familia y casa por casa.
Ingredientes
Para preparar Garam Masala en polvo necesitas:
- Un palo de canela de unos 5 cm. de largo
- 1 cucharada sopera de comino
- 1 cucharada sopera de clavos de olor
- 1 cucharada sopera de semillas cardamomo
- 1 cucharada sopera de semillas de cilantro
- 1/4 de nuez moscada
- 3/4 cucharada sopera de anís o hinojo
- 1/2 cucharada sopera de pimienta negra
- 3 hojas pequeñas de laurel
Preparación
La preparación del Garam Masala es muy simple. Los pasos son los siguientes:
- Tostar todos los ingredientes en una sartén sin aceite o a horno suave hasta que estén fragantes.
- Dejar enfriar.
- Una vez fríos, moler en una moledora de café o de especias.
- Moler hasta obtener un polvo fino.
- Tamizar el polvo para eliminar cáscaras, fibras y otros
- Guardar herméticamente, alejado de la luz.
Se puede utilizar tanto en el sofrito de los platos indios como espolvoreado ssobre los platos al momento de comer. Es cosa de metodología (y de gustos).
Notas
- Es vital que las especias no se quemen. Las especias pueden pasar de fragantemente tostadas a quemadas en sólo unos segundos.
- Toma esta receta sólo como un punto de partida: la idea aquí es jugar: jengibre en polvo, macís, neguilla, alcaravea… las posibilidades de variaciones y sustituciones son muchísimas. Es cosa de dar rienda suelta a tu creatividad y experimentación.
- Curiosamente, esta es de las pocas mezclas de especias que no llevan ají.
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